miércoles, 14 de diciembre de 2011

Sexo del bebé, ¿Qué prefieres?

En mi caso, niño.

Tenía clarísimo que quería un niño, desde mucho antes de pensar siquiera en tener un bebé seriamente. Cuando me quedé embarazada, soñaba y soñaba con un niño. Tampoco soy extremista, si hubiera sido una niña hubiera sido la misma alegría e ilusión, pero en mi interior quería un niño a toda costa y lo llevaba propagando a los 4 vientos desde que vi las dos rayitas rosas. Pensé que por tanto querer niño me iba a salir niña, porque con la suerte que tengo...

En la primera ecografía, nos dijeron que era aún muy pequeño el feto y no se veía. En la segunda, con todos los nervios del mundo, pregunté si ya se veía si venía con churro o con castañita.

El ginecólogo dijo: "yo en mi línea sacando niñas, ya van 6 hoy". Vuelco al corazón. Miro al futuro papá que se ha quedado mudo también (y eso que a él le daba igual). "¿Niña?" alcancé a balbucear. El ginecólogo me volvió a decir que si y siguió mirando el resto de cosas importantes.

No sabría decir qué mezcla de sentimientos tuve en ese momento. Estaba tan segura de que llevaba un churrito dentro... Aunque esté mal decirlo, me llevé una desilusión.

Cuando estaba acabando, le pregunté si podía volver a mirar para asegurarnos. Miró y dijo: "Vaya, pues me he equivocado. Es un varón". Creo que el vuelco que me dió el corazón lo oyó hasta el propio señor. Se me empezaron a caer lágrimas. ¡Era mi churrito!

De todos modos fui a hacer la ecografía 4D para, aparte de ver su carita preciosa y de asegurarme que estaba completamente bien de todo, comprobar que era realmente un niño, porque el ginecólogo me había metido miedo primero diciendome que era niña, luego niño...

Y siempre llevo su carita de la 4D en la cartera, porque fue la primera vez que le vi. Di tanto la paliza con verle el churro en la 4D que hasta me dieron una ecografía dónde se veían perfectamente los huevecillos y el churro.

Es curioso que para niña teníamos nombre y para niño no. Si era niña se iba a llamar como mi abuela, la que ya no tengo a mi lado. Pero si era niño... harina de otro costal. No me gustan los nombres de esos raros que tanto se llevan ahora. Ni los vascos, que también se llevan un montón. No nos gustaba ninguno. De los tradicionales tampoco nos hacían mucho tilín. Pensemos en llamarlo como su papá, pero no me gustaba la idea. Al final decidimos que ya que somos asturianos, iba a tener un nombre asturiano. Y así elegimos su nombre, que nos encanta.

Antes de saber su sexo, tuve un sueño. Mi bebé nacía, estaba perfectamente bien y veia con toda claridad que era un niño. Pero tenía la cabeza de mi perra jajajaja.

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